Existen numerosas especies de medusas y la gravedad de su picadura varía enormemente de unas a otras. Sin embargo, casi todas las picaduras causadas por estos animales resultan sumamente dolorosas para humanos y perros por igual, por eso en este artículo queremos informarte sobre las precauciones y medidas que debes tomar para evitar las picaduras de medusas en los perros y cómo tratarlas en caso de que sucedan.
¿Qué es una medusa?
Las medusas son animales marinos invertebrados que habitan en gran parte de los mares del mundo y se las reconoce como una de las especies más longevas de la tierra. Su cuerpo está compuesto por tres partes principales:
- La umbrela: se conoce como umbrela a la parte superior con forma de sombrilla u hongo que poseen las medusas. Esta tiene una textura gelatinosa y es donde se encuentran resguardados la mayoría de los órganos vitales de la medusa (aunque no poseen cerebro ni corazón).
- Los brazos orales: estos son tentáculos que rodean el único orificio que poseen las medusas el cual cumple la función de boca y de ano a la vez. La función de estos es capturar presas y transportarlas hasta la boca para alimentarse.
- Tentáculos urticantes: los tentáculos urticantes de las medusas son aquellos que poseen cnidocistos (pequeños aguijones) que al menor contacto con ellos liberan una gran cantidad de células urticantes. Estas células producen un dolor muy fuerte y agudo, que dependiendo de la especie de la medusa puede o no producir la muerte.
¿Por qué atacan las medusas?
Lo primero que debemos aclarar es que las medusas no atacan, ya que son animales sumamente pasivos. Sin embargo, para defenderse de su entorno estas poseen aguijones en algunos de sus tentáculos que liberan una toxina urticante por dos motivos: por el contacto con otro objeto o ser vivo, o por osmosis.
La liberación por osmosis sucede cuando las células urticantes sufren un cambio brusco de temperatura o salinidad. Por ello, una de las primeras precauciones que se debe tener si un animal o persona sufre la picadura de una medusa es nunca lavar la herida con agua dulce.
Los perros por su parte suelen ser blancos fáciles para las medusas dado que son muy curiosos y suelen acercar su hocico a objetos y animales para examinarlos. También es posible que, al correr o caminar por la playa, encuentren una medusa en la arena y no la perciban y pisen sus tentáculos y sean picados de esta forma, ya que los tentáculos de las medusas siguen siendo venenosos aún después de muertas.
¿Cómo saber si a mi perro lo picó una medusa?
Distinguir una picadura de medusa de otro animal puede ser sencillo si el tentáculo de la misma quedó adherido a la zona afectada del cuerpo de tu perro. Sin embargo, sin este tentáculo los síntomas que se presentan son muy similares a las de otras picaduras, por lo que es necesario que un veterinario examine rápidamente a tu perro para distinguirla.
Los síntomas comunes de la picadura de medusa son:
- Dolor
- Irritación y enrojecimiento
- Inflamación
- Edema
- Y en algunos casos dificultad respiratoria
¿Qué hacer si a mi perro lo pica una medusa?
En caso de que a tu perro le pique una medusa probablemente sienta un dolor bastante fuerte. Además, al tener una anatomía más pequeña que la de los humanos la dosis de toxina que recibe tiene un mayor impacto que en nosotros, por lo que es necesario atender la picadura rápidamente:
- Evitar que el perro se rasque ni lama, intentando tenerlo lo más quieto posible.
- Aplicar hielo cubierto con un trapo, bolsa o toalla para que el contacto no sea directo sobre la piel. Permanece unos 15 minutos colocando el hielo sobre la zona afectada para reducir el dolor mediante el frío.
- Examinar la piel en busca de restos de la medusa o sus tentáculos. Siempre debes tener mucho cuidado de no tocar los tentáculos ya que estos continúan liberando veneno aun estando desprendidos. Preferiblemente utiliza guantes o cubre tus manos con bolsas u otro objeto para realizar esta búsqueda.
- Si localizas restos en el cuerpo de tu perro retíralos (con las manos cubiertas) y enjuaga las zonas afectadas y donde se encontraban los restos con agua salada. Es muy importante que no laves la zona con agua dulce, solo con agua salada, ya que sino los restos de células que queden en tu perro explotarán exponiéndolo a más veneno.
- Por último, dirígete al veterinario más cercano para que atienda a tu perro y cure la herida correctamente.
Si tu perro sufre una picadura de medusa acude rápidamente a nuestra Clínica Veterinaria Alborán en Aguadulce
Las picaduras de medusas pueden ser de gravedad, por eso es necesario examinar rápidamente a tu perro para descartar cualquier riesgo y a la vez aliviar el dolor de esta picadura. Acude nuestra Clínica Veterinaria Alborán en C/ Rancho, 4 (junto a Guardia Civil), 04720 Aguadulce, Almería.
0 comentarios